Comunicación III
Taller de Redacción II
La mayoría de la gente que la rodea es feliz, ¿y ella?, ella tan sólo intenta dibujar ideas en el aire, construir castillos de celofán, soñar despierta y evocar aquel día....
En esa ocasión su vida se encontraba en un estado de desconcierto, había perdido la confianza en todos, bueno, excepto en una persona, la más importante, su mejor amiga, ella misma, sí, aún se tenía y eso bastaba para querer seguir.
Todas las tardes caminaba sin rumbo alguno, deteniéndose sólo cuando algo le llamaba la atención, ese día, al hacerlo sus ojos se forzaron para leer el encabezado de un periódico, ¨Bomba destruye hospital¨, la noticia amarillista del día –pensó- la de hoy, mañana y siempre.
Continuó leyendo un poco, al menos hasta donde su vista le permitía, al parecer una de las personas sobrevivientes era una niña de cinco años de nombre Clara. De pronto, sin saber cómo, tras el periódico vio el rostro de un muchacho, le era conocido, pero no lo recordaba exactamente, él tan sólo esbozo una leve sonrisa y se perdió en el matiz grisáceo del papel, para ella eso fue más de lo que alguien le pudo regalar.
El viento siguió su camino, las hojas de los árboles cayeron, la gente llegaba y se iba de su vida, simplemente el tiempo transcurrió. Aquella situación la creía en el olvido, hasta que encontró un pedazo de papel que tenía escrito lo que parecía ser una canción, su vista se concentró en una frase subrayada que decía: ¨Sonríe, sonríe para mi¨. El tiempo hizo su trabajo y comprendió lo que pasó ese día.
En esa ocasión su vida se encontraba en un estado de desconcierto, había perdido la confianza en todos, bueno, excepto en una persona, la más importante, su mejor amiga, ella misma, sí, aún se tenía y eso bastaba para querer seguir.
Todas las tardes caminaba sin rumbo alguno, deteniéndose sólo cuando algo le llamaba la atención, ese día, al hacerlo sus ojos se forzaron para leer el encabezado de un periódico, ¨Bomba destruye hospital¨, la noticia amarillista del día –pensó- la de hoy, mañana y siempre.
Continuó leyendo un poco, al menos hasta donde su vista le permitía, al parecer una de las personas sobrevivientes era una niña de cinco años de nombre Clara. De pronto, sin saber cómo, tras el periódico vio el rostro de un muchacho, le era conocido, pero no lo recordaba exactamente, él tan sólo esbozo una leve sonrisa y se perdió en el matiz grisáceo del papel, para ella eso fue más de lo que alguien le pudo regalar.
El viento siguió su camino, las hojas de los árboles cayeron, la gente llegaba y se iba de su vida, simplemente el tiempo transcurrió. Aquella situación la creía en el olvido, hasta que encontró un pedazo de papel que tenía escrito lo que parecía ser una canción, su vista se concentró en una frase subrayada que decía: ¨Sonríe, sonríe para mi¨. El tiempo hizo su trabajo y comprendió lo que pasó ese día.
.... esos detalles eran y son su felicidad.
6 comentarios:
Suave la forma en que resolviste el ejercicio. Muy bien.
Problemas: el uso de la coma (recuerda que también hay punto y coma) y su función en el texto.
-el profe
Aún tengo problemas para poder emplear punto y coma, no sé identificar cuando es valido ponerlo, espero me pueda explicar bien ese detalles. Gracias.
Brenda M.
(elimine la ¨s¨ extra). Brenda
muy suave tu historia al menos en ella hay una parte de mi, por ejemplo: yo siempre he dicho que soñar es bueno y hacer lo que te gusta mucho mejor,sobre todo si se tiene confianza en uno mismo para lograr lo que se propone uno.
felicidades muy buen trabajo
tu amigo
rajiv
Gracias, creo que tiene un elemento con el que todos nos identificamos: el soñar... y cómo trabajamos para lograr esos sueños.
A diferencia de la mayoría del salón (al menos a como he visto y leído)a mi se me dificulta crear ese tipo de historias, así que claro tomé elementos míos y los intenté amoldar a los que nos dio el profe, el resto si fue de la nada je!.
Brenda
Muy buen relato!... da gusto leerlo pues al igual que el de Mickey... transporta...
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